martes, 15 de febrero de 2011
EL MOMENTO
Ella se levanta. Como todas las mañanas, se pone la bata pero no encuentra los calcetines. Maldiciendo, se dirige descalza a la cocina y se sirve una taza de café. Una cucharada de azúcar, como todas las mañanas. Ella siempre deja un poco de café en el fondo de la taza, nadie sabe por qué. Como todas las mañanas, ella se lava la cara, se seca con la toalla y mira su rostro en el espejo pero hoy algo a cambiado. Hoy su mirada es diferente. Hoy hay un brillo especial en sus ojos y por primera vez se da cuenta de quien es.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario